martes, 14 de mayo de 2013

INSTANT / 9 /



Composición propia a partir de imágenes extraídas de Andrés Gallardo (joyas porcelana), Prada ss12 y otros.
 

La concepción de mundos ideales ha existido a lo largo de la historia, desde que el ser humano es consciente de sí mismo. El pensamiento de que tiempos pasados fueron mejores, también habita hoy en la mente de más de un humano. Una reflexión que no tiene por qué ser desacertada observando en el momento en el que nos encontramos. Una sensación que se une con el sentimiento de nostalgia, entendido como la pena, la tristeza, la melancolía motivada por el recuerdo de un tiempo pasado. Podríamos decir, que Lana del rey, una de las cantantes emergentes en el panorama musical actual, representa a la perfección en sus letras y su persona la neo – nostalgia de la que hablamos. Del Rey en algunas de sus canciones y videoclips, como VideoGames, nos recuerda a un mundo utópico, ideal, en el que cree, pero del que se ha visto desencantada muchas veces, aunque continúe creyendo en él. Lana del Rey nos transporta con su voz susurrante, melancólica y frágil a tiempos pasados, donde nos explica de manera nostálgica aquel pasado bonito pero a la vez lleno de tristeza, por un amor truncado. La creencia del amor eterno, aquel amor que falló, pero en el que la artista confía que la vida los vuelva a unir en algún momento. Una estética que evoca al pasado, a una puesta de sol en verano situada en el mejor paisaje de Los Ángeles. California, Hollywood, piscinas, estética vintage, cielos azules, el paseo de la fama, Elvis, parques de atracciones, Ford del Rey, los años 50 y 60, figuritas de porcelana y cerámica, rosas… Una simbiosis entre aquello que fue y lo que hoy es.

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